Agrotendencias que te volarán la cabeza 2021

En el 2020 cuando el mundo paró y la gente corrió a acaparar sus despensas, ese caos se convirtió en el mejor catalizador para cuestionarnos y para transformar, inicialmente, los imaginarios y las percepciones sobre los ecosistemas y la tierra, para volver al origen y redescubrir nuestra propia naturaleza.   

Empezamos a evidenciar los problemas estructurales de nuestro sistema agroalimentario y a escuchar voces sobre la necesidad de concentrar los esfuerzos en crear negocios más justos para tener resultados tangibles. Nos preguntamos sobre la procedencia de nuestros alimentos y experimentamos en la cocina con ingredientes que no cabían antes en nuestro estilo de vida afanado y desconectado. 

La sostenibilidad dejó de ser suficiente y los grandes activistas enfocados en temas de cambio climático, empezaron a promover el concepto de regeneración. A su vez, un virus invisible puso en jaque la manera de hacer las cosas, incluso en esos territorios en donde nadie sabía cómo se hacían las cosas y la digitalización apresurada fue la única alternativa. Quienes pensaban que el campo era solo relevante por la posibilidad de desconectarse de la ciudad, descubrieron que sin campo, esa ciudad tampoco existiría y empezamos a redefinir nuestra percepción de la población campesina. 

El mundo ha cambiado sin duda, y el campo y la ruralidad tienen ahora mucho por contar.

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¿Sabes cómo los alimentos regeneran a las personas y al planeta?